martes, 8 de septiembre de 2009

El curioso ser

De mi escapada forzosa a Lugo os he contado que la catedral es chula, pero, justo al lado de la catedral, hay un curioso ser que se pasa las horas mirando a los viandantes y visitantes que por los alrededores del emblemático lugar se pasean. Esquivo a mi objetivo, se mostraba pasota e inalterable con mi presencia.

Será que, ¿se veía engatusado por tan curioso lugar? O quizá, ¿esperaba que alguien le prestase atención? Sea lo que fuere, el curioso ser seguía contemplando el paso de los viandantes por delante de sus narices, embobado como si un hechizo lo hubiese castigado eternamente a presenciar el paso de los días desde su idílico emplazamiento frente al gran templo Lugués.

Un pequeño anticipo

Conseguirlo no fue fácil, pero con prisas pero sin pausas, obtener la recompensa esperada logra saciar esas ganas de escapar lejos, a un lugar distinto, otra cultura y otra manera de vivir la vida.
Tras ocho inolvidables estapas, esto es mi anticipo de lo que ha deparado mi estancia en el país islámico.
Un saludo desde Túnez.

Perdonaz el tamaño de la foto pero desde aquí no puedo modificar su tamaño.