sábado, 22 de agosto de 2009

Callejeando mi ciudad

Quizá por ubicación, quizá por acceso. Sola, larga, estrecha, sombría e incluso tétrica puede llegar a parecernos una de las calles que, a mi parecer considero más de la desmano de toda la ciudad. Ni por su descuido ni por su dejadez, sino por la soledad en la que siempre se ven envueltos sus empedrados y lo variopinto de sus viviendas.
El casco viejo Ourensano, siempre deja buen sabor de boca.


P.D. Para los de casa, ¿sabríais decirme que calle es?

No hay comentarios: