miércoles, 9 de septiembre de 2009

Diario de Viaje - Túnez -La Llegada-

Tras un interminable día de trote, que comenzaba a las 00.45 del día 1 de Septiembre de 2009 con noche de carretera hasta la capital, un par de transbordos de metro hasta Barajas, una larga espera para el despegue, un corto vuelo y más feliz aterrizaje, poníamos pies en tierra en tierras tunecinas sin saber que nos depararían los ocho días de estancia en el país.
La primera impresión que me causo Túnez al llegar, aparte de su sofocante y húmedo calor, fue la tranquilidad de su aeropuerto, más tras el caos de Barajas que habíamos sufrido en nuestras propias carnes. El tráfico de aviones y de gente era casi "inexistente" por llamarlo de alguna manera. Pasamos los controles y nuestro guia Borguian (espero escribirlo correctamente) nos da la bienvenida en la recepción de visitantes del Tunis Carthage Aeroport.
Tras colocarnos con nuestro grupo, subimos al autobús, saludamos al chófer de nuestra viaje e iniciamos la marcha, destino; Hammamet. Por el camino alguna imagen poco interesante y las primeras impresiones de un lugar que daba la sensación de estar a medio construir.
Lo curioso del camino al hotel, fue el comprobar que en la autovía por la que discurríamos no había un sólo metro de valla recto. Las líneas de la calzada tampoco tenían pinta de haberse pintado con regla y se asemejaban más a una serpenteante línea.
El tráfico es un caos y la gente no respeta la más mínima regla.







2 comentarios:

Anónimo dijo...

"El tráfico es un caos y la gente no respeta la más mínima regla."
El tráfico es un caos "organizado"... si condujeras en la M-30 de Madrid, verías lo que que es un caos a gran velocidad... y con lo de las reglas, te has pasado 3 pueblos...
Agur yogurt!!

El menda dijo...

un caos organizado?? conducir en la m-30 no es más dificil q hacer una media de 60 en alguna carretera gallega... me he pasado? yo solo me dedico a escribir lo que veo.
Mi intención no es ofender.